viernes, 24 de febrero de 2012

Las lumbalgias de origen visceral

Las lumbalgias de origen visceral

Las posibles relaciones entre las lumbalgias rebeldes o crónicas y el sistema visceral (digestivo, hígado, riñones,..).

Se han realizado muchos estudios y existen múltiples teorías al respecto. Una de ellas es la teoría desarrollada en las Cadenas Musculares por Leopold Busquet, o lo que hoy en día llama Cadenas Fisiológicas.
 
Esta teoría se hace evidente en nuestra práctica diaria en muchas ocasiones. En este artículo hablaremos de las lumbalgias rebeldes, que se repiten en el tiempo o que no desaparecen y no responden a los tratamientos habituales.

¿Por qué nos duele la espalda?

Realmente existen múltiples causas. Tenemos casos de traumatismos directos, ante lo que no podemos hacer nada salvo tratar sus consecuencias y evitar que vuelva a repetirse. Pero también podemos hablar de la ergonomía y la higiene postural en el puesto de trabajo. Las malas posturas que al realizar nuestro trabajo o incluso en nuestras tareas diarias aumentan la presión sobre los discos intervertebrales y provocan, en un primer momento, una lumbalgia por sobrecarga y posteriormente, con su repetición, una degeneración de las carillas articulares, deshidratación de los discos, protusión (abombamiento) discal, o incluso la hernia de disco. El hecho de trabajar con cargas es otro riesgo añadido al sufrimiento de nuestra espalda, que acelera todo el proceso de degeneración de una estructura tan vital para el cuerpo como es nuestra columna vertebral.
 
En todos estos casos el médico suele recomendar reposo, tratamiento rehabilitador, ejercicios, medicación y ciertas pautas de higiene postural para evitar agravar la lesión.

 

Pero ¿qué pasa cuando estas recomendaciones no funcionan? ¿Por qué no funcionan?

Se supone que hemos seguido las recomendaciones médicas y hemos intentado corregir lo que era la causa. Pero ¿por qué no pensar que existe algún otro factor que incide en nuestro dolor? ¿Podemos conformarnos con la teoría de: “es la genética. Mi padre tenía dolor y por tanto yo también”?
Las Cadenas Fisiológicas de L. Busquet ofrecen una visión nueva que nos hace pensar desde una perspectiva global del individuo y de su patología. Una de sus premisas se basa en la idea que nuestra estática (postura) es el resultado de nuestras presiones internas, lo que significa que somos el resultado de nuestras propias tensiones. Asegura además que el cuerpo está preparado para el movimiento y por tanto, el movimiento no debería ser la causa de la lesión. Sí influiría, en cambio, la mala gestión de ese movimiento. Son las cadenas fisiológicas las que programan y gestionan el movimiento en base a 3 principios básicos: el equilibrio, el confort y el ahorro de energía. El fallo en alguno de estos 3 principios se hace evidente cuando aparece el dolor y las compensaciones.

 
Estos principios podemos contemplarlos imaginando un hombre sano caminando. Tendrá equilibrio, se encontrará cómodo, y seguramente podría andar mucho tiempo sin cansarse demasiado. Imaginemos ahora un señor con lumbalgia. Para poder caminar con equilibrio y con dolor, acomodará su postura, aparecerán las compensaciones, por ejemplo con una flexión de tronco y una mano en la zona de la espalda, lo que requerirá mucho más esfuerzo para caminar porque solicitará más músculos. Hará todo lo que su cuerpo considere necesario para andar con el menor dolor posible (aunque pierda estabilidad, confort o le cueste mucho esfuerzo). El cuerpo, siempre sabio, va a protegerse del dolor y las estructuras que puedan lesionarse, creando las compensaciones necesarias.
Para L. Busquet, estamos formados por cadenas fisiológicas, los circuitos anatómicos que administran la estática, la dinámica y las compensaciones del individuo. Las divide en 2 grupos:
 
  • Las cadenas dinámicas (formadas por los músculos) 
  • Y las cadenas estáticas (formadas por el resto de tejidos, a los que se llama conjuntivos: nervios y vasos circulatorios, huesos, órganos o vísceras, ... ).

¿Qué es la cadena visceral y cómo puede influir en nuestra columna lumbar?

En términos generales la cadena visceral está formada por el conjunto de órganos, glándulas y tejidos que se localizan en nuestras cavidades corporales. Las vísceras no están colocadas ahí como quien coloca un objeto dentro de una bolsa. De ser así nunca tendríamos orden. Podemos pensar que nuestro estómago siempre estará a la izquierda, debajo de los pulmones y el corazón, así como nuestro hígado estará a su derecha y el resto de órganos estarán en sus respectivos sitios. Esto se debe gracias a un conjunto de ligamentos que sujetan los órganos entre sí y gracias al tejido del peritoneo, que es como el saco que contiene las vísceras. Pero el peritoneo tampoco está libre en nuestro interior. Está ligado a nuestra estructura ósea (la columna, las costillas y la pelvis) y también a los músculos que la rodean. De manera, que tenemos una “cadena visceral” que se encuentra delante de la columna lumbar y relacionada con ella a través de diferentes tejidos conjuntivos que le otorgan flexibilidad, movilidad y estabilidad, influyendo en su estática (su posición) y su dinámica (su capacidad de movimiento).


Cuando existe un problema visceral, por ejemplo un colon irritable, o una úlcera de estómago o un serio problema de estreñimiento, nuestro cuerpo como hemos explicado antes, va a protegerse del dolor. En este caso, hará que los tejidos que rodean ese problema se aproximen al punto de dolor para aliviar su tensión, de la misma manera que un niño pequeño se encoge sobre su estómago cuando tiene un cólico. Esto implica que nuestra columna vertebral lumbar, puede aumentar su curva (lordosis) hacia adelante para reducir el espacio que hay con el punto de dolor, tirada por los músculos, ligamentos y tejido conjuntivo que se recogen alrededor del problema. Al aumentar la lordosis, nuestros discos vertebrales aumentan su presión posterior.


Cuando este problema se convierte en algo a largo plazo, tenemos una columna vertebral que sufre continuamente presiones, lo que nos lleva a una lumbalgia rebelde que no reacciona a los tratamientos habituales. Aun habiendo resuelto el problema médico, los tejidos, que cuentan con memoria, seguirían protegiendo la zona hasta que “alguien”, digamos las “manos del terapeuta”, les ayuden a volver a su estado inicial.
Aquí es donde entra la terapia visceral. La liberación de estas tensiones y el alivio del dolor harían que los tejidos recobraran su longitud y tono normal y restaurará el equilibrio de la columna lumbar, aliviando así esas lumbalgias rebeldes, que hasta ahora no habían respondido a ningún tratamiento.


Artículo copiado de: http://www.fisioholistik.com/ 

miércoles, 22 de febrero de 2012

Ergonomia en la oficina

Buenas tardes a todos!

Bueno, ya estamos a mitad de semana, qué tal lo llevais?
Para los que estais todo el día en la oficina ahi va un video sobre ergonomia.

Saludos.


lunes, 20 de febrero de 2012

Las Cervicalgias

La cervicalgia es aquel dolor que se produce en la región cervical de la columna vertebral de causa variable. Engloba un amplio abanico de alteraciones que, como causa o consecuencia, tienen su localización en el cuello.
El dolor cervical es un problema frecuente en las sociedades industrializadas, y afecta a adultos de todas las edades y de ambos sexos, aunque hay una mayor prevalencia a partir de los 40 años y en las mujeres. Son especialmente vulnerables aquellas personas que realizan trabajos repetitivos, trabajos sedentarios, trabajos de alta carga física, trabajos con P.V.D (pantallas de visualización de datos), e incluso trabajos en los que se dan factores psicosociales "de riesgo" tales como una baja satisfacción con el trabajo, poco control sobre el mismo, o poco apoyo por parte de los compañeros, entre otros.

La columna cervical es sin duda el sistema articular más complejo del cuerpo humano. Posee 37 articulaciones distintas cuya función es el sostenimiento de la cabeza, así como garantizar una gran cantidad de movimientos respecto al tronco y destinados a controlar todos los órganos de los sentidos: la vista, el oído, el olfato y el gusto, así como el tacto y la propiocepción.
Se calcula que movemos la cabeza unas 600 veces a la hora, lo que unido a la larga expectativa de vida, el trabajo, la vida sedentaria y la pérdida de masa muscular que la acompaña, son causas implicadas en el origen de problemas degenerativos y de su sintomatología dolorosa.
Según un estudio epidemiológico más del 10% de la población refiere 3 episodios de cervicalgia durante los últimos 3 años.

CAUSAS

No existe una sola causa que explique el dolor cervical. Normalmente el dolor cervical es de origen mecánico, dentro de este tipo se incluyen las restricciones de movimiento articular, los trastornos musculares, la disfunción neural, la disfunción fascial, los trastornos discales y las alteraciones posturales. Otras posibles causas son de origen inflamatorio, de origen visceral, degenerativo o, incluso de origen psicosomático.
El dolor de origen mecánico se engloba genéricamente bajo el concepto de "dolor cervical no-específico", que será al que hagamos referencia en este texto. Este tipo de dolor se caracteriza fundamentalmente porque raramente es constante. Este tipo de dolor cambia dependiendo de lo que hacemos, puede aumentar o disminuir cuando adoptamos una/s determinada/s postura/s, o realizamos un/os determinado/s movimiento/s. Excluimos de las indicaciones aquel dolor cervical de origen infeccioso, neoplásico, debido a artritis reumática o por otras enfermedades sistémicas.

SÍNTOMAS

El dolor cervical puede ser aislado (dolor cervical local) o puede presentarse asociado a otros síntomas y signos como: (a) dolor de escápula, hombro y brazo asociados, (b) alteraciones en el movimiento en la región cervical y torácica (rigidez o inestabilidad), (c) dolor irradiado hacia la región del miembro superior (el dolor irradiado hacia miembro superior por irritación de una raíz nerviosa cervical se conoce como cervicobraquialgia), (d) dolor de cabeza (cefalea), (e) tensión/distensión en diferentes músculos, (f) hormigueos, (g) mareo, entre otros.

TRATAMIENTO

Fasi Analgésica
Aquí prevalecen todas las técnicas destinadas a disminuir el dolor y la inflamación de los tejidos. A continuación las explico detalladamente:
*Termoterapia: se distinguen dos modalidades dependiendo de factores como la sensibilidad del paciente al calor, si es portador de objetos metálicos en forma de osteosíntesis o de marcapasos, si tiene alteraciones de la presión arterial o mujeres embarazadas.
En todos los casos anteriores se utiliza la modalidad superficial consistente en lámparas de infrarrojos o envolturas de parafango cuyo efecto es aumentar el umbral de la sensibilidad dolorosa y la vascularización de la zona para intentar disminuir la contractura muscular.
En los demás casos se utiliza la modalidad profunda en forma de Microondas y de Onda Corta que con la combinación de sus efectos magnético y eléctrico introducimos corriente en el interior del tejido muscular y hueso y apenas hay componente térmico sobre los tejidos superficiales que son piel y grasa.
*Ultrasonidos: el efecto mecánico que producen estas ondas se utiliza con el objetivo de un calentamiento tisular y un efecto trófico regenerador de la zona lesionada.
*Electroterapia: como los Tens o las interferenciales.
*Masoterapia: con esta técnica se pretende además de la aproximación al paciente la evaluación de la lesión mediante la palpación.
Los efectos de esta técnica son:
_ Aumento del umbral de la sensibilidad dolorosa.
_ Relajación muscular por estiramiento lento, progresivo y repetido de los husos neuromusculares mediante técnicas de amasamiento y tensión de las fibras musculares.
_ Movilización de los distintos planos tisulares para favorecer los deslizamientos entre ellos mediante maniobras de palpar-deslizar los pliegues cutáneos.
_ Relajación muscular y analgesia en los puntos dolorosos con maniobras como el masaje transverso profundo.

FASE DE RECUPERACIÓN DE LA MOVILIDAD
Aquí en esta fase hemos de ser capaces de lograr el mayor movimiento posible de la zona cervical provocando el menor dolor para el paciente. Son las siguientes:
*Movilizaciones pasivas manuales: se realizan de forma muy suave intentando crear confianza en el paciente y su objetivo es aumentar el rango de movilidad articular, mediante el estiramiento de la musculatura y estructuras periarticulares, contracturadas o retraídas, acompañado de una ligera tracción simultánea de manera manual
Estos ejercicios deben realizarse evitando compensaciones y falsos movimientos que provoquen compresiones dolorosas.
*Movilizaciones activo-asistidas manuales: igual que en el apartado anterior pero aquí se le indica al paciente que nos ayude en el sentido del movimiento que vamos a realizar, es decir, que realice pequeñas contracciones y siempre intentando provocar la mínima sensación de dolor.
*Técnicas de estiramiento: son movilizaciones o ejercicios físicos que propician la elongación del complejo miofascial. Los objetivos consisten en alargar los músculos y fascias y de esta forma permitir un mayor rango de movimientos de la zona cervical. Aquí debemos insistir sobre todo en el estiramiento del músculo trapecio causante de la mayoría de restricciones de la movilidad cervical. Se realizan en decúbito supino para evitar compensaciones con las zonas de alrededor. En la ilustración expongo los más importantes.
*Técnicas de fortalecimiento: el tipo de técnicas de trabajo muscular que se utilizan son ejercicios isométricos en los cuales no se produce ninguna modificación del ángulo de movimiento empleando resistencia manual o theraband. También existe la variedad con una pelota como se puede ver en las siguientes fotografías. Se realizan tanto en la posición supina como en sedestación y la intensidad, la frecuencia y la resistencia respetarán siempre el umbral del dolor.

PROPIOCEPCIÓN Y CERVICALGIA
En esta fase el fisio hace un ejercicio con el paciente de forma que la atención de éste y por tanto su control voluntario sea fijado en una dificultad que no es el verdadero objetivo de la maniobra. De esta forma con el mismo ejercicio el paciente va a hacer en modo casi inconsciente un movimiento que constituye el objetivo que realmente se quiere reprogramar. Hay dos técnicas indicadas:
*Contracciones evocadas a distancia: le provocamos al paciente reacciones de equilibrio estandarizadas. Conociendo la reacción previsible de los segmentos, elegimos la dirección de desequilibrio que corresponde a lo que nos interesa

El enfoque preventivo activo debe incluir asimismo (1) la reeducación de aquellos hábitos posturales que favorecen o provocan el dolor cervical, (2) mejoras ergonómicas del puesto de trabajo, (3) y el control, en la medida de lo posible, de aquellos factores psicosociales que puedan interferir en la aparición o mantenimiento del dolor.

viernes, 10 de febrero de 2012

Los pares craneales

Buenas Tardes!

Llegamos a fin de semana, probablemente muchos esteis agotados, asi que a descansar y a coger fuerzas para empezar el lunes con ganas!

Hoy os dejamos un video muy interesante que habla sobre los nervios craneales, merece la pena verlo.

Un saludo y buen fin de semana a todos.


jueves, 9 de febrero de 2012

Ostepatia y las hernias discales

Os dejamos un video muy interesante sobre todo lo que se puede llegar a conseguir con la osteopatia en las hernias discales.




Esperamos que os guste.

miércoles, 8 de febrero de 2012

El Bruxismo

El bruxismo es el hábito involuntario de apretar y rechinar los dientes inconscientemente, que afecta a entre un 10 y un 20% de la población.

El término apretar significa juntar fuertemente los dientes superiores y los inferiores, especialmente los de la parte posterior. Este hecho de apretar los dientes ejerce presión sobre los músculos, los tejidos y otras estructuras que rodean la mandíbula, lo cual puede llevar a que se presente dolor e inflamación de la mandíbula, dolores de cabeza, dolores de oído, daño en los dientes y otros problemas. Estos síntomas pueden causar trastornos de la articulación temporomandibular (ATM).




Causas, incidencia y factores de riesgo

Las personas pueden apretar y rechinar los dientes de una manera inconsciente tanto durante el día como durante la noche, aunque el mayor problema puede ser el bruxismo nocturno, ya que es más difícil de controlar.
El paciente nocturno no es consciente del problema, generalmente es la familia quien se da cuenta de ello.
El bruxismo diurno suele ser más apretador que rechinador: En algún momento del día, ya sea por el trabajo o por cualquier otra causa, se ha generado el hábito de apretar con los dientes al mismo tiempo.
Aún no se ha llegado a un acuerdo sobre la causa exacta del bruxismo, pero en muchas personas el agente desencadenante de esta afección puede ser el estrés durante el día. Algunas personas probablemente aprietan sus dientes y nunca sienten síntomas. El hecho de si el bruxismo causa dolor y otros problemas puede contener una mezcla complicada de factores (el nivel de estrés que se experimente, la fuerza y duración del hábito de apretar y rechinar los dientes, si los dientes están desalineados, la postura, la capacidad de relajación, la dieta, los hábitos al dormir y otros factores). En cada persona probablemente es diferente.

Síntomas
  • Dolor o inflamación de la mandíbula
  • Chasquidos y crepitaciones
  • Dolor de cabeza
  • Dolor de oído (en parte porque las estructuras de la articulación temporomandibular están muy cerca del canal auditivo y en parte debido a un dolor muscular referido, es decir, un dolor que se percibe en un lugar diferente a donde se origina realmente)
  • Ansiedad, estrés y tensión.
  • Insomnio, depresión, trastornos alimentarios



Tratamiento

Agentes físicos
El profesional deberá tener a mano algunos procedimientos clínicos como la utilización de agentes físicos para el tratamiento de las disfunciones de ATM y músculos masticatorios. La variedad a disposición del médico es amplia. Tales procedimientos pueden ser tomados como coadyuvantes en la terapia sintomatologica y la combinación de sus usos podría, también, ser contemplada.

Masajes
La indicación específica de masajes reside en un auxiliar para relajar la musculatura, aumentar la temperatura de la masa muscular y proporcionar rápida eliminación de las toxinas catabolizadas durante las actividades contráctiles. El uso de masajes seria más ventajoso en grandes masas musculares del cuerpo pero su eficiencia puede también ser considerada en los músculos masticatorios. La acción de masaje directamente sobre un nódulo doloroso tendría un efecto eficaz, pero habría que tener mucho cuidado cuando tratamos los músculos de pequeño porte (como los músculos masticatorios), para evitarnos lesiones inadvertidas. El masaje seria mas eficaz cuando es acompañado de ejercicios musculares.

Movilizaciones
La movilización puede ser definida como movimientos pasivos impuestos a las articulaciones, dentro de un intervalo fisiológico. Estas maniobras pueden mejorar la lubricación sinovial articular y reducir la tensión elástica de los tejidos circunvecinos oscilantes a la mandíbula con una pequeña amplitud de la apertura bucal. Su practicidad puede ser cuestionable, pero aumenta la tendencia a mejorar las condiciones de un cuadro clínico, desde que se respeta el límite doloroso del paciente.

Ejercicios terapéuticos
Son considerados relevantes en la recuperación funcional del sistema masticatorio. Tales ejercicios usan una acción motivadora de los músculos promoviendo el movimiento mandibular, en que el paciente se torna en el principal agente de su propio tratamiento. Algunos autores consideran los ejercicios necesarios para la resolución de los casos subclínicos residuales, previniendo futuras disfunciones.
Es importante que el profesional instruya al paciente en el uso de maniobras para evitar resultados indeseables. Es necesario que el paciente comience la serie de prácticas con movimientos suaves y en aumento gradual.

Algunas reglas deben tenerse en cuenta, como:
  • Regularidad. No interrumpir la serie.
  • Fatiga. Evitar la fatiga; nunca el paciente deberá pasar su límite doloroso y nunca forzar un movimiento lancinante.
  • Repeticiones. Evitar excesivas repeticiones para prevenir fatiga y dolor.

Estas preguntas te las puedes hacer a ti mismo, si tienes alguno de estos síntomas acude a un profesional.

o ¿Tienes dificultades para abrir la boca?
o ¿Tienes dolor en las articulaciones de la mandíbula (ATM)?
o ¿Te duele la cabeza o el cuello con frecuencia?
o ¿Tienes migrañas?
o ¿Eres bruxista o apretador (Aprietas o rechinas los dientes)?
o ¿Siente que se te desencaja la mandíbula (ATM)?
o ¿Tienes ruidos articulares (ATM)?
o ¿Te duele la musculatura de la cara o de la boca?
o ¿Te despiertas con mucha tensión o sensación de bloqueo?